En 1954, Raymond Kroc vendió 8 batidoras a un restaurante de gran éxito por su eficacia y rapidez, el de los hermanos Dick y Mac McDonald en San Bernardino (California). «Si hubiera muchos restaurantes como este —pensó él— vendería muchísimas batidoras». Y pronto cayó en la cuenta sobre la idea de las franquicias y dejó de pensar en las batidoras, llegó a un acuerdo con los hermanos y en 1955 abrió un restaurante similar en Des Plaines, Illinois, su estado natal. El negocio funcionaba y en 1960 había más de cien restaurantes McDonald´s por todo EE.UU. Aquí tenemos un claro ejemplo de lo que es innovación.

 

 

El ejemplo anterior muestra la esencia de la innovación, entendida como la capacidad de alterar el orden de las cosas establecidas para hacer otras nuevas. Los beneficios de la innovación motivan cada vez más a los empresarios a apostar por este tipo de fuente de ventaja competitiva. Sin embargo, conseguir ser una empresa innovadora no es tarea fácil.

 

¿Alguna vez ha tenido una idea innovadora?, ¿Posees los medios para llevarla a cabo?, ¿Disfrutas de las ventajas competitivas de tu empresa? o ¿Es una de ellas? Éstas son algunas de las cuestiones que nos hemos de plantear a la hora de emprender un proyecto de innovación.

 

Pero hay que tener presente algo muy importante. Una cosa es innovar y otra emprender proyectos. No es innovación cuando se crea o modifica algo que no aporta valor al cliente, como por ejemplo cambiar el color a un producto o introducir una nueva tecnología en un proceso productivo. La innovación tiene siempre dos valores, el primero es que brinda valor al cliente final y el segundo, es que genera beneficios para la empresa que innova.

 

La innovación es un proceso creativo que poco tiene que ver con ideas geniales, y mucho con observar con rigor y disciplina nuestro entorno para encontrar soluciones rentables y sostenibles a nuestros problemas, retos y necesidades.

 

La innovación, como lo entiende Nazca System, está relacionado con crear productos y servicios altamente disruptivos, de fácil penetración en el mercado y al alcance de todos.

 

La experiencia del usuario es importante porque trata de satisfacer las verdaderas necesidades del cliente, el cual interactúa con los productos y servicios que ofrece la marca. El objetivo es proporcionar experiencias positivas que mantengan al usuario fiel a la marca.

 

 

¿Es posible lograr o mejorar la verdadera experiencia de usuario?
 
 

 

Hasta el momento la experiencia de usuario se basa en la interpretación de los datos de usuarios, información que se obtiene a través del procesamiento de millones de datos estructurados y no estructurados, usando técnicas como el big data, el data mining, el data science y otras.

 

Lo complejo de estas técnicas se debe principalmente a la naturaleza no estructurada de gran parte de los datos generados por las tecnologías modernas, como los web logs, identificación por radiofrecuencia, sensores incorporados en dispositivos, las búsquedas en Internet, las redes sociales, computadoras portátiles, teléfonos inteligentes, dispositivos GPS y registros de centros de llamadas.

 

En la mayoría de los casos, con el fin de utilizar eficazmente esta gigantesca cantidad de datos, debe combinarse con datos estructurados (normalmente de una base de datos relacional) o de alguna aplicación comercial, como un ERP (Enterprise Resource Planning) o un CRM (Customer Relationship Management).

 

Finalmente, todo esto busca ayudar a comprender y procesar una enorme cantidad de datos para que estos puedan ser utilizados para extraer conclusiones y contribuir en la mejora y el crecimiento de la empresa, pero con un elevado costo de infraestructura. A esto hay que agregar el sesgo que estan técnicas generan al no individualizar al consumidor, sino que encontrar patrones repetitivos, tendencias o reglas que expliquen el comportamiento de los datos que se han ido recopilando con el tiempo por medio de grupos socio demográficos. Estas técnicas tratan de comprender el comportamiento de clientes, pero desde la interpretación y visión de la empresa.

 

Pero, ¿qué pasaría si un usuario, al interactuar con una plataforma de eCommerce, entregara a la marca de todos sus atributos, gustos e intereses personales antes de realizar la compra?, ¿Acaso la marca no tendría el suficiente tiempo como para procesar estos atributos, gustos e intereses y así ofrecer los productos y servicios que son de “verdadero interés” de cada consumidor?, ¿Esta forma de ofertar productos y servicios no aumentaría significativamente el volumen de ventas la marca?, ¿Y el consumidor, no se vería beneficiado al recibir ofertas persoalizadas 100%?

 

Esto ya es posible gracias al concepto de Usavatar que ha desarrollado Nazca System, por medio de su plataforma Youvi y Youvi Mall para la personalización de la experiencia de compra.